¿Cómo se prepara una sesión con niños?
La primera de las complicaciones, la hora. Ya sabéis que a los fotógrafos nos encanta la
hora mágica, en la que tenemos la luz dorada que nos da fotografías muy cálidas, la hora antes del
atardecer. A esa hora, los niños suelen estar más cansados, menos colaboradores, hay que organizar la cena alrededor...Como compensación, llega el invierno, que nos da atardeceres más tempranos que lo hacen todo más fácil.
Siguiente paso: es bueno escoger una
temática o ponerse de acuerdo en la
combinación de colores del vestuario. Nosotros aquí escogimos la vuelta al cole, y como aún había calor, introdujimos algunos elementos fuera del vestuario a modo de decorado, lo que los americanos llaman "
photo prop", que equivale a lo que nosotros miramos y decimos: ¿Eso lo has comprado en el chino, no?
De nuevo, el otoño e invierno traen ventajas para las sesiones de fotos. Unos
complementos de color en la ropa de abrigo pueden ayudar a que las fotografías luzcan mucho más!
El tercer paso, y más importante, es
el juego. Los niños, cuanto más pequeños son, no quieren posar, a menos que les sobornes con alguna recompensa, así que como no es cuestión de inflarles a chuches, lo mejor que puedes hacer para asegurarte de que tendrás las tomas que quieres, es preparar juegos que les "obliguen" a estar en la
colocación que tu quieres según la luz, el fondo... Y no te frustres si no todos los juegos que has preparado salen, al fin y al cabo,
son niños! A cambio, te regalarán caritas y momentos que jamás hubieses podido soñar.